Permiso laboral por cirugía estética
Uno de tus empleados tiene un familiar que va a someterse a una operación de cirugía estética voluntaria que supondrá descanso domiciliario. Tu trabajador solicita el permiso retribuido por hospitalización o intervención quirúrgica de parientes de hasta segundo grado de consanguinidad o afinidad.
¿Tu empleado tiene derecho a obtener el permiso laboral a causa de una operación estética?
Aunque, en este caso, exista hospitalización o se produzca una intervención quirúrgica, tu empresa no está obligada a conceder el permiso solicitado.
El origen de este permiso retribuido, ya sea concedido por el Estatuto de los Trabajadores como por la mayoría de los Convenios Colectivos, tiene su origen en que para que proceda, debe tratarse de procesos cubiertos por la acción protectora de la Seguridad Social y que den derecho a una baja por enfermedad. Esto no ocurre en este supuesto, ya que la normativa de Seguridad Social establece expresamente que no quedan cubiertos por la Seguridad Social aquellas técnicas, tecnologías o procedimientos que no guarden relación con enfermedad, accidente o malformación congénita o que tengan como mera finalidad la mejora estética.
Por tanto, si la operación que tiene el familiar de su trabajador es por mejora estética sin relación con enfermedad o accidente, se trata de un supuesto no incluido dentro de los permisos retribuidos por enfermedad u hospitalización de un familiar, por lo que tu empresa no está obligada a concederlo ni a remunerarlo.
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